hay tantas cosas que quiero decirte y no podré, y la verdad, no quiero seguir guardándolo, pero no puedo dártelo, así que aprovecho este espacio íntimo y personal para dedicarte las mil y una cartas que te dediqué y nunca pude darte. al menos hasta que mi corazón deje de adolecer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario